El cáncer de ovario no es una sola enfermedad, sino varios tipos distintos de tumores que afectan a los ovarios, señala un panel de expertos de EE. UU.
Las evidencias sugieren que muchos cánceres de ovario comienzan en otros tejidos, como las trompas de Falopio, y al final se propagan a los ovarios. En otros casos, los cánceres surgen de células que no se consideran como parte de los ovarios, según un informe de las Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina de EE. UU. El informe fue encargado por el Congreso.
Los autores anotaron que hay "lagunas sorprendentes" en el conocimiento sobre el cáncer de ovario. Hicieron una llamada a investigaciones adicionales para obtener más información sobre las causas y mejorar la prevención, la detección temprana, el tratamiento y la gestión de la enfermedad.
"Aunque se han logrado avances en la investigación sobre el cáncer de ovario en las últimas décadas, queda mucho por aprender", comentó en un comunicado de prensa de la academia Jerome Strauss III, presidente del comité del informe. Strauss también es vicepresidente ejecutivo de asuntos médicos y decano de la Facultad de Medicina de la Universidad Estatal de Virginia, en Richmond.
"Mientras más se comprenda sobre la biología básica de los varios tipos de cánceres de ovario, por ejemplo el lugar del cuerpo en que se originan, más rápidamente podremos lograr avances en la prevención, las pruebas de detección, la detección temprana, el diagnóstico, el tratamiento y la atención de respaldo", explicó.
Cada año, en Estados Unidos se diagnostica un cáncer de ovario a más de 21,000 mujeres, dijeron los investigadores. Y más de 14,000 mujeres mueren de la enfermedad cada año, añadieron. La tasa de supervivencia a cinco años es de menos del 50 por ciento, anotaron los investigadores.
El cáncer de ovario inicial no tiene ningún síntoma distintivo. Tampoco hay una prueba de detección efectiva para el cáncer de ovario. Alrededor de dos terceras partes de estas pacientes son diagnosticadas en las etapas tardías de la enfermedad, cuando el cáncer ya se ha propagado a otras partes del cuerpo, anotaron los autores del informe.
El informe también encontró que la calidad de la atención ofrecida a las pacientes de cáncer de ovario varía mucho en el país. Varios grupos han desarrollado directrices para un estándar de atención, pero menos de la mitad de las pacientes de cáncer de ovario reciben la atención recomendada, reveló la investigación.
El informe encontró dos factores predictivos de un mejor resultado para las mujeres con cáncer de ovario. Uno era ser tratada por un oncólogo ginecológico. El otro era recibir tratamiento en un hospital que gestione una gran cantidad de esos casos. Pero muchas pacientes no tienen acceso a ese tipo de atención, señalaron los autores del informe.
Para reducir las desigualdades en la atención, recomendaron que médicos y científicos busquen formas de garantizar un uso constante de los estándares de atención sugeridos actualmente.
El informe también señaló que unos mejores métodos para identificar a las mujeres con un riesgo alto de cáncer de ovario podrían mejorar la prevención y la detección temprana. Por ejemplo, hay vínculos firmes entre el cáncer de ovario y los antecedentes familiares de la enfermedad, unas mutaciones hereditarias específicas como en el BRCA1 y el BRCA2, y ciertos síndromes hereditarios de cáncer, anotaron los autores.
Fuente: Medline Plus