El médico especialista catalán es hepatólogo del Clínic de Barcelona y del Mount Sinai de Nueva York.
"Yo pensaba que era posible llegar al éxito trabajando poco, pero he descubierto que no", bromea Josep Maria Llovet. "Todos los médicos e investigadores consagrados que conozco tienen una capacidad de trabajo enorme".
Sus estudios sobre cáncer de hígado le sitúan como el investigador biomédico más citado de España: dirigió el estudio sobre el fármaco sorafenib que cambió el tratamiento de los tumores hepáticos; elaboró junto al equipo del Clínic una clasificación de cánceres de hígado que hoy se utiliza en todo el mundo; ha clasificado los distintos tipos de cáncer de hígado según su perfil molecular; ha identificado genes que favorecen la progresión del cáncer... Todo ello dividiendo su tiempo entre el Clínic y el hospital Mount Sinai de Nueva York, donde pasa una semana al mes y dirige el programa de cáncer hepático. "Para dedicarte a este trabajo, tiene que gustarte mucho, porque exige sacrificios importantes. Y es fundamental que la familia lo entienda y te apoye".
Aparte de la capacidad de trabajo. y de "tener un poco de talento, que también debe ser importante", Llovet destaca otros dos requisitos para ser un buen investigador biomédico. Uno es ·saber elegir bien tu campo de investigación, que debe ser lo bastante pequeño para poder abarcarlo". El otro, "trabajar en un entorno donde puedas llevar a cabo tus ideas. Yo no hubiera podido hacer lo que he hecho si no hubiera estado en el Clínic".
Fuente: La Vanguardia