La sobremortalidad por cáncer en Huelva está directamente relacionada con el estrato social de la población, según se desprende de un estudio elaborado por Antonio Escolar, jefe de Medicina Preventiva y Salud Pública del hospital Puerta del Mar de Cádiz.
La Consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales ha encargado dos nuevos estudios sobre la situación epidemiológica de Huelva, los cuales acaban de ser presentados y a cuyas conclusiones ha tenido acceso Europa Press.
El primero de los estudios se denomina 'La sobremortalidad por cáncer en la provincia de Huelva. Mirar al pasado para explicar el presente', mientras que el segundo es 'Evolución de la mortalidad en Andalucía según la edad, el periodo de defunción y la cohorte de nacimiento', a cargo de Ricardo Ocaña, investigador de la Escuela Andaluza de Salud Pública.
Los investigadores de ambos trabajos han presentado las conclusiones en una reunión técnica a entidades y asociaciones vinculadas al plan de calidad ambiental de Huelva, así como profesionales sanitarios y del ámbito de la universidad. Las conclusiones ponen en evidencia "el descenso de la mortalidad en Huelva".
En concreto, el estudio 'La sobremortalidad por cáncer en la provincia de Huelva. Mirar al pasado para explicar el presente' se ha realizado a partir de tres ejes específicos.
El primero de ellos tenía por objeto analizar la mortalidad por cáncer en períodos no asociados expositivamente a las industrias del Polo de Desarrollo Industrial de Huelva, así como en períodos posteriores a la puesta en marcha de las industrias y evaluar la presencia de desigualdades sociales en los riesgos de muerte en la ciudad de Huelva y la distribución geográfica de la mortalidad por cáncer y otras causas en la ciudad de Huelva.
El segundo de los ejes estudiados tenía como meta realizar un análisis sobre la historia social de la provincia y la capital onubense y el tercero estudiar las historias de vida de un grupo de personas mayores de la provincia.
Tras analizar estos ejes, las conclusiones del estudio apuntan, respecto a la mortalidad previa a la puesta en marcha del Polo de Desarrollo Industrial, que la provincia, especialmente la ciudad de Huelva, ya presentaban en 1960-1964 una sobremortalidad por cáncer "significativamente mayor que la de España".
Así, esta situación afectaba "con mayor intensidad" a los hombres que a las mujeres. Por tanto, la sobremortalidad por cáncer era previa a la puesta en marcha del Polo Químico.
Entre el resto de causas de sobremortalidad respecto a España, destacaban en ese mismo período las enfermedades infecciosas, con un protagonismo muy relevante de la tuberculosis pulmonar. Esta situación, mucho peor en la ciudad de Huelva que en el conjunto de la provincia, era un indicativo de la existencia de importantes problemas de tipo socio-sanitario en la población provincial y sobre todo de su capital.
En cuanto a la evolución de la mortalidad entre 1975-2008, señala que entre esos años se ha mantenido la mortalidad por cáncer en la provincia en ambos sexos "por encima de la media nacional". Si bien, a partir finales de los años 90 del pasado siglo se observa una inflexión en dicha tendencia con una disminución de las tasas, que se produce casi en paralelo a la del conjunto de España.
La inflexión en la mortalidad por todos los tumores malignos en la provincia de Huelva coincide en los hombres con la producida en cáncer de pulmón. En mujeres, por el contrario se observa un incremento de la mortalidad a partir del año 2000, de forma similar a la de España.
Asimismo, sobre el eje relacionado con las desigualdades, han destacado que en el período comprendido entre 1992 y 2007, en la ciudad de Huelva se identifica la presencia de importantes desigualdades sociales en el riesgo de muerte por cáncer en relación con el nivel de privación de la sección censal. Así, a mayor desempleo, menor nivel de estudios y mayor trabajo no cualificado, el riesgo de muerte aumenta.
Se observa un marcado gradiente social en el riesgo de muerte por cáncer, en el sentido de que a medida que "aumenta el nivel de privación, aumenta el riesgo de muerte". Apuntan que si la mortalidad del conjunto de la ciudad hubiera sido el de las secciones censales más favorecidas, la ciudad de Huelva no presentaría una sobremortalidad respecto a España.
En consecuencia, la reducción de la desigualdad social es un instrumento "clave" para acercar la mortalidad por cáncer de la ciudad de Huelva a la del conjunto de España.
ANÁLISIS ESPACIAL
Respecto al análisis espacial de la mortalidad de la ciudad de Huelva, los investigadores observan un patrón general que contrasta el centro histórico con la periferia de la ciudad. En la primera se agrupan la mayoría de las secciones censales de menor riesgo de muerte y en la segunda lo contrario.
Huelva era hasta los años 60 una de las provincias más pobres y menos desarrolladas de España. La ciudad de Huelva, que se encontraba en la cola de los índices de desarrollo socioeconómico, se transformó en poco años a partir de 1964, pasando de una sociedad primaria y rural a una industrial con claros síntomas de terciarización, que ocasionaron, sin embargo, "fuertes contradicciones y desequilibrios".
De este modo, indican que la reducción de las desigualdades sociales en salud debería ser "especialmente considerada" al abordar el problema de la sobremortalidad en la provincia de Huelva y especialmente en su capital. Por tanto, ello requiere de un compromiso para impulsar la salud y la equidad en todas las políticas y para avanzar hacia una sociedad más justa.
SEGUNDO ESTUDIO
De otro lado, el estudio 'Evolución de la mortalidad en Andalucía según la edad, el periodo de defunción y la cohorte de nacimiento' de Ricardo Ocaña, investigador de la Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP), se ha realizado con el objetivo de evaluar el efecto de la edad, el período de defunción y la generación de nacimiento en la mortalidad registrada durante el período 1981-2008 en Andalucía y en cada una de las ocho provincias.
Además de la mortalidad por todas las causas, se ha analizado la mortalidad por cáncer de pulmón, cáncer de mama femenino, enfermedades isquémicas del corazón y enfermedades cerebrovasculares. Para ello, se ha realizado un estudio ecológico donde la unidad de análisis fue cada grupo anual de edad, año de defunción y año de nacimiento.
Los principales resultados del estudio concluyen que existe un efecto de la edad, período de defunción y cohorte de nacimiento sobre la mortalidad para todas las causas estudiadas semejante en todas las provincias andaluzas y para el conjunto de la comunidad.
En este sentido, y en líneas generales, el riesgo de muerte decrece con el avance generacional y disminuye con el tiempo. Así, determina que si la tendencia actual continúa, es de esperar que las tasas de mortalidad asociada a la mayoría de las patologías estudiadas sigan disminuyendo en los próximos años.
En lo que respecta a la mortalidad por cáncer de pulmón, el estudio observa que el riesgo de mortalidad masculina disminuye progresivamente en las generaciones nacidas después de 1950, mientras que la femenina aumenta para las cohortes posteriores a 1932. Así, la tasa de mortalidad femenina ha aumentado en la última década, posiblemente debido al incremento del consumo de tabaco entre las mujeres. Sobre la mortalidad femenina por cáncer de mama se observa que ésta disminuye progresivamente en las generaciones nacidas después de 1940 y que la tendencia decrece desde 1995.
Fuente: Europapress