Su sistema inmunitario patrulla constantemente su cuerpo para mantenerlo sano. A veces, las células inmunitarias también son llamadas a la acción para hacer frente a un problema potencial. El laboratorio de la profesora asociada del Laboratorio de Cold Spring Harbor (CSHL) Camila dos Santos descubrió que, tras el embarazo, las células mamarias llaman a unos refuerzos del sistema inmunitario llamados células T asesinas naturales (NKT) para evitar la aparición de tumores. Este hallazgo ilumina una nueva forma en la que el embarazo reduce el riesgo de cáncer de mama.
En el sistema inmunitario existen dos líneas de defensa. La primera es la respuesta innata, en la que participan células inmunitarias que atacan a cualquier molécula extraña que encuentren. La segunda es la respuesta adaptativa, que consiste en células inmunitarias que responden específicamente a las peticiones de ayuda de determinadas moléculas. Las células NKT son una población única de células que están presentes en todo el cuerpo y que pueden participar en ambas respuestas. La estudiante de posgrado del CSHL Amritha Varshini Hanasoge Somasundara dice que en el período posterior al embarazo:
"Hay un aumento de este tipo específico de células [NKT], y sólo en la glándula mamaria. No vemos la expansión en el resto del cuerpo, aunque las células NKT están presentes en todas las partes del cuerpo".
El equipo quería saber qué hacía el mayor número de células NKT en el tejido mamario. Hanasoge descubrió que, en los ratones, las células epiteliales de la mama, que recubren los conductos de lactancia, producen una proteína específica llamada CD1d después del embarazo. Si las células no presentaban CD1d, los investigadores no observaron un aumento de las células NKT en el tejido; las células epiteliales se volvieron cancerosas y se convirtieron en tumores.
Hanasoge y dos Santos creen que las moléculas CD1d llaman a las células NKT para controlar las células epiteliales del tejido mamario después del embarazo. Si se vuelven cancerosas, las células NKT pueden matarlas rápidamente para evitar el crecimiento del tumor.
Los hallazgos del equipo establecen un nuevo vínculo entre el embarazo y el sistema inmunitario en la prevención del cáncer de mama. El laboratorio de Dos Santos quiere saber cómo pueden trasladarse estos hallazgos a los humanos y qué otros factores pueden influir en la abundancia de células NKT en el tejido mamario, como el envejecimiento y la menopausia, ambos asociados a un mayor riesgo de cáncer de mama. Dos Santos afirma:
"Una de las hipótesis en las que estamos trabajando ahora es: ¿los embarazos más tardíos traen consigo la misma expansión de los mismos subtipos de células inmunitarias que los embarazos que tuvieron lugar al principio de la vida?".
El equipo publicó sus hallazgos en Cell Reports.
Fuente: Laboratorio de Cold Spring Harbor